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jueves, 18 de febrero de 2010

ES VIERNES Y SE ANTOJAN UNOS TRAGOS.

Todavía es común escuchar el muy viejo dicho "chupando que es gerundio". Y muchas veces nos damos cuenta que la persona ni sabe tomar, ni está muy enterada del correcto uso del gerundio.

El gerundio no es otra cosa que la conjugación de verbos que puede terminar en -ando, -iendo o -yendo. Sin embargo éste se emplea muchas veces mal. Tan es así, que muchos realizan su mejor esfuerzo para evitar el gerundio al escribir, como quien se encontrase ante un paraje peligroso y prefiriera dar un rodeo con tal de no transitar por él. Pero el rodeo nunca es buen procedimiento para escribir. De hecho en mi humilde opinión, peor que equivocarse es escribir con miedo.

Volviendo al gerundio… éste hace el oficio de adverbio, lo cual significa que sirve para indicar el modo, la circunstancia o característica en que se ejecuta la acción que expresa el verbo.

También puede significar una condición, una circunstancia o una causa, como en los siguientes ejemplos.

Vagando por la ciudad, encontré casualmente a un amigo.
Siendo todos italianos, se entendieron en su lengua.
Teniendo el mantel sobre la mesa, servimos la cena.

El tiempo significado por el gerundio coexiste con el del verbo a que se refiere o es inmediatamente anterior a él. Así, en el último ejemplo, el acto de tender el mantel es inmediatamente anterior al de servir la cena.

Por consiguiente, en los ejemplos anteriores sería incorrecto decir:

Vagué por la ciudad, encontrando un amigo.
Todos eran italianos, entendiéndose en su lengua.
Tendieron el mantel, sirviendo su cena.

Añadiremos que no es propio del castellano emplear el gerundio en función de adjetivo...

Lo Incorrecto
Joven hablando francés solicita empleo.
Se emplearon ratones pesando sesenta gramos.
Desde Sudáfrica, informando Pedro García.
No bebí de esa agua conteniendo impurezas.

Lo Correcto
Joven que habla francés solicita empleo.
Se empleaban ratones que pesaban sesenta gramos.
Informó desde Sudáfrica Pedro García.
No bebí de esa agua que contiene impurezas.

Sin embargo, no se opone a esto el hecho de que sean correctas frases como: sacaron un caldero de agua hirviendo; Jehová se manifestó a Moisés en la zarza ardiendo; vimos un pájaro volando, oraciones en las que hirviendo, ardiendo, volando -gerundios empleados como adjetivos-, pueden explicarse por la omisión del verbo "estar" u otro análogo.

El gerundio no es nunca atributivo, sino explicativo únicamente, es decir, que denota una actitud que se toma, un acto que se está realizando o un movimiento que se ejecuta en el lapso señalado por el verbo principal.

Puede pues decirse: sorprendí a un amigo cortando flores (JLo: no te pongas rojo, ha de haber sido otro amigo); ví al Chango sacudiendo un suéter de rombitos. Pero es obvio que no podemos decir: Conozco a un señor siendo muy rico; recibí una caja conteniendo libros, ya que ni el hecho de ser rico ni el de contener libros se expresan en las citadas frases como ocasionales, sino, por decirlo así, tienen carácter permanente. Y no se diga lo mal que se lee o escucha.

En cuanto al gerundio compuesto (habiendo amado, habiendo temido, habiendo surfeado) también significa anterioridad con respecto a otro hecho: habiéndole dicho a ella cuanto era necesario, me despedí; donde habiéndole dicho es anterior al despedí. Y por hoy también me despido de ti.

Pero antes recuerda, que si por ser viernes te vas de copas, al alcoholímetro no le importa que ya sepas usar el gerundio.

Salud.



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